Sobre la solidaridad interterritorial, la igualdad de los españoles y el Trasvase del Ebro

Esta es la propuesta de resolución de urgencia que ayer presenté en el Consejo de la Juventud de la Región de Murcia, en nombre de la asociación EDUM, para su debate en la asamblea que se celebra este fin de semana en La Manga.

PROPUESTA DE RESOLUCIÓN DE URGENCIA

Sobre la solidaridad interterritorial, la igualdad de los españoles
y el Trasvase del Ebro

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
La Región de Murcia, al igual que el resto de zonas que forman parte de su región natural, y también el resto del Levante español, sufren un déficit estructural en materia hídrica que ha ido intentando superar en base a modernización de regadios, aprovechamientos del agua, ahorro, concienciación, … que ha supuesto que sea una de las zonas del mundo, junto a Israel, en donde más se aprovecha el agua.
Desde los Reyes Católicos, los sucesivos dirigentes nacionales han ido proponiendo obras para intentar paliar este problema, como canalizaciones, mejoras de insfraestructuras e interconexiones de cuencas.
En la década de 1930, el ministro socialista Indalecio Prieto promovió un Plan Hidrológico Nacional que incluía la interconexión de cuentas, con el Trasvase del Tajo al Segura como una de sus obras principales. El propio socialista prieto calificó de “no sólo enemigos al régimen republicano, sino de míseros traidores a España” a quienes se opusieran a estas obras.
En los años 90, con el último gobierno socialista de esa década, el también ministro socialista José Borrel propuso otro Plan Hidrológico Nacional basado en la interconexión de cuencas, explicando que existían más de 5 veces la cantidad de agua trasvasable en el Ebro de la que aprovaría el gobierno del popular Aznar años después.
En el año 2001, el Consejo Nacional del Agua dio luz verde al Plan Hidrológico Nacional, con más del 80 % de los votos favorables, proyecto presentado por el Gobierno de la Nación el año anterior. Este Plan incluía el Trasvase de aguas del Ebro al Levante Español, y suponía la solución a la falta de agua en la Comunidad Valenciana, la Región de Murcia y Almeria, y un alivio para la cuenca del Tajo, única desde la que ya se trasvasaba agua desde décadas atrás. También incluía un gran número de obras que solucionarían problemas hídricos en otros lugares, como diversas zonas de Aragón y de Cataluña.
Surgieron ciertas voces en contra del Trasvase del Ebro, aduciendo problemas medioambientales, indicando que el mejillón cebra impediría el buen curso del agua, o alertando de la destrucción del Delta del Ebro. Todos ellos obviando que los expertos ya habian analizado el proyecto en el CNA y habian dado su visto bueno, además de la mayoría de las Comunidades Autónomas, incluidas algunas socialistas, como Castilla la Mancha.
Como consecuencia de la falta de una mayoría absoluta en la victoria del candidato socialista a la presidencia del gobierno en el año 2004, éste cedió ante los independentistas catalanes para que apoyaran su investidura, derogando el Trasvase del Ebro, y ahogando así en la sequía a miles de españoles, como consta en el Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados.
Durante los años siguientes, el Presidente del Gobierno de la Nación siguió mostrando su compromiso de no hacer el Trasvase del Ebro, como pudimos escuchar en diversas intervenciones durante la campaña electoral de los pasados meses. Mientras tanto, ha ido indicando que la solución al déficit estructural en el Levante y en el Sureste español es la desalinización, contra las posturas de la mayoría de los especialistas, que solo consideran esto una solución puntual para lugares donde no se pueda hacer llegar agua de otras maneras. Recordemos la gran contaminación que producen, acelerando el cambio climático, el daño que causan en las tierras de regadío donde se use su agua, el gran coste económico que conllevan, y la poca vida útil de sus componentes.
Este mes hemos podido ver con que velocidad el Gobierno de la Nación ha pactado con el Gobierno de la Generalidad de Cataluña un Trasvase del Ebro a la zona urbana de Barcelona, sin saber de estudios de impacto ambiental, el daño del mejillón cebra, la desaparición del Delta, ni los compromisos firmados o expuestos por el Presidente Rodríguez en el sentido de que no haría nunca el Trasvase del Ebro.
Barcelona necesitaba agua y se le ha llevado, como debe ser. Murcia, Valencia y Almería llevan décadas intentando recibir una solución a este mismo problema, pero el Gobierno de la Nación nos ha considerado inferiores en derechos a los catalanes.

CONCLUSIÓN
Los jóvenes de estas regiones vemos como quién tiene que dar soluciones a nuestros problemas, nos condena a vivir en una tierra sin futuro, mientras cede al momento a las exigencias de otros.
No pedimos más de lo que nos merecemos por derecho, que es lo que ya dice la propia Constitución Española: todos los españoles somos iguales. Y si somos iguales, tendremos que recibir el trato que merecemos ante nuestros problemas.
Por todo ello, proponemos al Consejo de la Juventud de la Región de Murcia la siguiente

DECLARACIÓN
El Consejo de la Juventud de la Región de Murcia muestra su descontento ante el desigual trato que los murcianos, y el resto de habitantes del Levante español, han recibido del Gobierno de la Nación en materia hídrica, negándose a realizar el Trasvase del Ebro a estas zonas pero sí haciéndolo a la zona urbana de Barcelona.
El Consejo de la Juventud de la Región de Murcia se sumará a las movilizaciones que el pueblo de la Región de Murcia, junto a nuestros vecinos valencianos y almerienses realicen en defensa de sus necesidades en materias de agua.

Estudiantes Demócratas
de la Universidad de Murcia